viernes, 25 de noviembre de 2011

¿Cuál fue el gran problema que los afecto?


El tema a tratar, en el siguiente ensayo, será La Cuestión Social durante el siglo XX se le denomina Cuestión social, al conjunto de problemas sociales y materiales que afectaron a los sectores más pobres de la población (la pobreza). El problema a plantear son las dificultades que hubo dentro de la cuestión social en el transcurso de este siglo. Para desarrollar este tema plantearemos las problemáticas surgidas en la época como lo son la carencia de viviendas mínimamente habitables, servicios higiénicos, alimentación, salud y otras necesidades básicas que no estaban cubiertas, y uno de los problemas más importantes fue el de la cesantía al parar las salitreras, el cual, fue el que produjo la emigración campo ciudad en buscas de nuevas oportunidades, este fue el objetivo más importante entre los otros que existían, también existieron otros tales como la huelga de carne y el paro de Antofagasta y los problemas de las viviendas populares, etc.
Dentro de la cuestión social también estuvo el auge salitrero y el impulso industrial donde se produjeron cambios de importancia se inicio un fuerte flujo de migración de la población hacía los centros mineros del norte y hacia las áreas urbanas de Santiago y Valparaíso, donde se produjo un aumento de concentraciones de trabajadores fue en ella donde se experimentaron las duras condiciones de trabajo y de vida.
Situación que define las crecientes demandas de estos sectores hacia los empresarios y las autoridades de gobierno. La migración se produjo del incremento de las actividades industriales y mineras lo que condujo a una absorción de la mano de obra en las ciudades y en los centros mineros. En el cual las ciudades no pudieron responder de forma digna a la población inmigrante rural. Fue también donde se conformo una situación de marginación social de estos sectores, lo que permitía actuar una posibilidad inminente de problemas sociales, estos surgieron de los cambios o transformaciones que vivió Chile al pasar por un periodo de gran auge.
La experiencia de la huelga de carne puso alerta a las autoridades las cuales se vieron un poco complicados y ordenaron el acuartelamiento de la esmeralda y la presencia en el puerto del crucero Blanco encalada. Por desgracia se produjo un nuevo enfrentamiento que según se anuncio en la cámara de diputado dejo 58 muertos y mas de 300 heridos. El problema de las viviendas populares tuvo varios inconvenientes tales como los servicios higiénicos que eran muy escasos, también dentro de la familia estaban los inconvenientes de las habitaciones o piezas donde llegaban a dormir hasta 8 personas y para ellos no era muy fácil vivir ahí, como lo anunciado en lo anterior el problema de viviendas agravo la salud pública, en particular los niños quienes eran los más perjudicados donde existieron las pestes infantiles entre 1905 y 1910 alcanzaron su mayor pick, la sarampión extermino a mas de 10 mil niños y adultos; el coqueluche a 14 mil, la difteria y el cruz a unos 2 mil y la gripe a más de 18 mil. El cambio del siglo mostraba un país con grandes problemas sociales no resueltos y un sistema parlamentario que hacía poco para derrotar esta miseria de grandes sectores de la población.
Fue a lo largo de estos años que se pusieron en marcha una serie de movimientos sociales que transformaron la cuestión social en un problema que afectó no sólo a los trabajadores sino a todo el país. Desde entonces, surgieron a la luz pública una serie de innumerables escritos, ensayos, artículos de prensa y tesis de grado que comenzaron a analizar sus causas y motivos, además de las posibles alternativas de solución. Esta amplia gama de debates políticos e ideológicos pueden resumirse en tres grandes corrientes.
La primera corriente se originó al interior del mundo conservador-católico, que a partir de la Encíclica Rerum Novarum adhirió a la línea social cristiana impulsada por la iglesia católica. A grandes rasgos, vio la cuestión social como resultante de una crisis moral que desvirtuó el rol dirigente y protector de la elite criolla. El énfasis estuvo puesto en la responsabilidad que le correspondió a los ricos en el cuidado y bienestar tanto material como espiritual de los más pobres, a través de la educación, la beneficencia, el socorro y la justicia. En síntesis, más acción social y menos caridad.
También podemos aportar a este ensayo que no solo los de la clase baja tenían problemas sino que también los de la clase alta los tenían porque los empleados se crían dueños de algunas minas.
Y también que en ese tiempo se le obligaban a los niños a trabajar a la edad de 8 a 9 años con sus padres en la mina ellos abandonaban el colegio e iban obligados por su padre ya que con el salario que tenían no les alcanzaban para poder comer, y las mujeres tenían que trabajar también las enormes ganancias que produjo la explotación salitreras beneficiaron solo a la oligarquía nacional. La clase trabajadora por el contrario, vivía en muy malas condiciones. La ausencia de leyes laborales permitían abusar del trabajo de los obreros , bajos salarios y ausencia de contratos, horarios de más de 14 horas diarias y explotación de mujeres y niños además los obreros y sus familias vivían en condiciones miserables hacinados en conventillos o viviendas que no contaban con los requisitos básicos de higiene, al no tener agua potable. Estas condiciones hacían proliferar las epidemias generando una alta tasa de mortalidad infantil, frente a estas dramática situación las autoridades no tomaban medidas por lo que los obreros reaccionaron formando diferentes organizaciones
Es indudable que la pobreza y las desigualdades sociales no surgieron en el país en la década de 1880, como tampoco han desaparecido en la moderna realidad del Chile actual. No obstante, ya desde finales de siglo XIX muchos elementos se conjugaron para transformar los problemas sociales en una cuestion social, como son, un contexto económico capitalista plenamente consolidado, marcado por una incipiente industrialización y un proceso de urbanización descontrolado que agravaron las malas condiciones de vida del trabajador urbano; una clase dirigente ciega e ineficiente ante los problemas y quejas del mundo popular; y, finalmente, una clase trabajadora que ya no estuvo dispuesta a quedarse de brazos cruzados esperando que el Estado oligárquico llegara a ofrecer alguna solución a sus problemas

En el aspecto laboral los obreros industriales y los mineros del salitre se hallaban aún más desprotegidos, ya que no existía una legislación al respecto y los abusos patronales eran perpetrados cotidianamente en las industrias y en las oficinas salitreras. Para el periodo de la llamada República Salitrera no existían los contratos de trabajo ni menos los sistemas de previsión; por el contrario, eran usuales las jornadas laborales de 14 horas de duración.
Las pésimas condiciones laborales eran aumentadas en las oficinas salitreras a través del sistema de fichas, el que implicaba que a los mineros no se les cancelaban sus remuneraciones con dinero de curso legal, sino que por medio de fichas confeccionadas con diversos materiales que servían como instrumento de pago en las pulperías emplazadas en cada oficina; lo paradójico del asunto es que las pulperías eran de propiedad de las mismas salitreras, lo que en la práctica significaba que el producto del trabajo de los mineros era acumulado en última instancia por los dueños de las propias salitreras.
Las precarias condiciones sociales y laborales en las ciudades, pero especialmente en las oficinas salitreras, originaron la aparición de un conjunto de organizaciones y movimientos sociales que agrupaban y que canalizaban las demandas de los obreros y mineros. Estas organizaciones se sumaron a las ya existentes como la Sociedad Unión de Tipógrafos, fundada en 1853 en la ciudad de Santiago y a la Sociedad de Artesanos de la Unión. En el año1900 se fundó el Congreso Social Obrero, organización que aglutinaba a más de 150 sociedades obreras, y en el año 1909 surgió la Federación Obrera de Chile (más conocida por su sigla FOCH).
La organización de los trabajadores en las oficinas salitreras dio paso a la aparición de la denominada “prensa obrera”, la que consistía en periódicos dirigidos a los mineros y que entre sus principales mensajes difundían la idea de la huelga como una herramienta de lucha contra la explotación y como medio de presión para obtener mejoras en sus prácticas laborales. Debido a la inexistente legislación laboral, las huelgas eran de carácter ilegal y eran violentamente reprimidas por las fuerzas policiales y por los servicios de guardias contratados por los dueños de las salitreras.
La represión contra las manifestaciones obreras y en especial contra las huelgas fue una constante del periodo que analizamos y las fuentes periodísticas dan cuenta de una considerable suma de enfrentamientos entre grupos de obreros y fuerzas policiales, e incluso algunas veces, contra contingentes compuestos por elementos militares. 
En el aspecto laboral los obreros industriales y los mineros del salitre se hallaban aún más desprotegidos, ya que no existía una legislación al respecto y los abusos patronales eran perpetrados cotidianamente en las industrias y en las oficinas salitreras. Para el periodo de la llamada República Salitrera no existían los contratos de trabajo ni menos los sistemas de previsión; por el contrario, eran usuales las jornadas laborales de 14 horas de duración.